Tanto si eres un diseñador experimentado de ropa deportiva como si estás empezando, sabes que los materiales utilizados en tus creaciones son tan importantes como el diseño. Hay tantas opciones de telas en el mercado hoy en día, cada una con sus propias ventajas y desventajas. Cuando se trata de crear ropa deportiva, las telas adecuadas son esenciales para el rendimiento y la comodidad. En este artículo, veremos algunas de las opciones de telas más populares para la ropa deportiva y qué las diferencia.
tela de nailon
El nailon es un polímero sintético que se produjo comercialmente por primera vez en la década de 1930. Su popularidad creció rápidamente debido a su apariencia elegante y practicidad. El nailon se puede fabricar mediante la reacción de productos químicos a base de carbono que se encuentran en el carbón y el petróleo en un proceso llamado polimerización por condensación. El polímero resultante luego se descompone en fibras individuales, que luego se pueden tejer en la tela que se usa para la ropa y otros productos textiles.
La resistencia y durabilidad del material lo hacen ideal para confeccionar ropa deportiva que requiere mucho estiramiento. El nailon también es conocido por sus propiedades reguladoras de la humedad, que ayudan a mantener cómodo al usuario durante el ejercicio al absorber el sudor y permitir que se evapore fácilmente. Sin embargo, si bien el nailon es una excelente opción para el equipo deportivo, no es la mejor opción para camisas o pantalones porque puede volverse pegajoso e incómodo cuando hace calor.
Otras telas que son buenas para la ropa deportiva incluyen la microfibra y el spandex. Estas dos telas sintéticas son muy livianas y se pueden usar para una variedad de diferentes tipos de entrenamientos. Sin embargo, ambas telas tienen tendencia a formar bolitas con el tiempo. El spandex tampoco es tan transpirable como otras telas, lo que puede ser un problema en climas húmedos o cálidos.
Por último, la fibra de bambú es otra opción cada vez más popular para crear ropa deportiva. Esta fibra natural es suave, absorbente y antimicrobiana. También se seca rápidamente, lo que puede ayudar a mantener al usuario fresco y cómodo durante el ejercicio o los deportes. Si bien el bambú es una gran opción para algunos tipos de entrenamientos, puede ser menos duradero que otras telas y puede acumularse con el tiempo.
A la hora de elegir un tejido para ropa deportiva, los factores más importantes son su peso y durabilidad. La ropa deportiva funcional debe ser muy duradera para resistir las exigencias de una actividad física intensa. También debe ser capaz de resistir abrasiones y soportar ciclos de lavado repetidos. Además, la tela debe ser transpirable para permitir que transporte la humedad como el sudor de la piel hacia el exterior de la prenda sin atraparla. Sin esta característica, el usuario puede sobrecalentarse rápidamente y comenzar a experimentar lesiones como tensión muscular y fatiga. El nylon, el poliéster y otras telas sintéticas son excelentes opciones para la ropa deportiva porque cumplen con estos requisitos. Para reducir su impacto ambiental, algunas marcas usan telas recicladas, mientras que otras trabajan para desarrollar alternativas de base biológica que podrían terminar siendo más sostenibles que el nailon tradicional.